domingo, 26 de marzo de 2017

LA IGLESIA RECONOCE EL CALVARIO DE LOS «MÁRTIRES DE ALMERÍA»

El Papa Francisco decreta beatificar a los 95 religiosos y 20 laicos, entre ellos dos mujeres, «muertos en odio a la fe»
Haber sufrido la muerte por odio a la fe. Eso es lo que une a los 115 protagonistas del homenaje a título póstumo que ha decretado celebrar el Papa Francisco; un hecho extraordinario en la historia contemporánea de la Diócesis de Almería. Este sábado el Palacio de Exposiciones y Congresos de Aguadulce ha albergado el solemne acto de beatificación de los conocidos como los «Mártires de Almería». Se trata de 95 religiosos y 20 laicos que, como advierte el Santo Padre en su «Decreto de Martirio», encontraron la muerte por el «profundo odio contra la iglesia católica» que se propagó durante la Guerra Civil.
Como relata el Obispo de Almería, Adolfo González Montes, en la carta remitida a los diocesanos, esta causa de los «Mártires de Almería» tiene su contexto propio «en la persecución religiosa que comenzó el año 1934 y se recrudeció de forma crudelísima durante la guerra civil española de 1936 a 1939, y en cuyo origen se encuentra un profundo odio contra la Iglesia católica». El prelado precisa en su epístola que estos «siervos de Dios (...) no son preferidos por la Iglesia por ser de uno de los bandos enfrentados de en la guerra, sino por haber muerto por amor a Cristo y por su causa». Al respecto detalla que «los mártires no han tomado parte en la confrontación violenta de los bandos enfrentados, sino que han sido víctimas de la violencia ejercida contra ellos a causa de su fe».


«Los mártires fueron perseguidos y muertos en odio a la fe desde los comienzos de la Iglesia, víctimas en ocasiones de crudelísimas torturas y amputaciones de miembros, actos acompañados de blasfemias, incitación al abandono de la fe, a la comisión de actos sacrílegos e impuros, arrastrados a la muerte con mofa de sus creencias religiosas de las que sus perseguidores pretendían que los mártires renegaran, incluso con el señuelo de salvarles la vida», señala González Montes. Al respecto, detalla que los siervos de Dios de esta causa son 95 sacerdotes, uno de los cuales es religioso franciscano, y 20 son seglares. De éstos, 18 son varones, y dos mujeres «cuyos nombres brillan con luz propia: Emilia Fernández Rodríguez, la “Canastera de Tíjola”, gitana de raza y mártir del Rosario, de 23 años; y Carmen Godoy Calvache, de 49 años, que padeció una cruel tortura antes de su muerte».
El proceso ordinario de esta causa se instruyó en la Diócesis de Almería del 11 de abril de 1995 y tras más de dos décadas de minucioso trabajo de campo y análisis, el 14 de junio del año pasado el Papa Francisco decidió la publicación del Decreto de Martirio de esta causa que reza como «José Álvarez-Benavides y de la Torre, Deán del Capítulo de la Catedral y 114 compañeros muertos en odio a la fe».
Al evento, además de 4.500 personas procedentes de diferentes puntos de todo el país, han asistido también, entre otros cargos religiosos, el Nuncio Apostólico, Monseñor Renzo Fratini; así como los cardenales de Madrid, Valladolid, Valencia y Emérito de Sevilla, Carlos Osoro, Ricardo Blázquez, Antonio Cañizares y Carlos Amigo, respectivamente. Los celebrantes principales de la beatificación han sido el cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación para las Causas de los santos; monseñor Adolfo González Montes, Obispo de Almería, y monseñor Francisco Javier Martínez Fernández, Arzobispo de Granada.

FUENTE: ABC ANDALUCIA

SEMBRADORES DE PAZ, TESTIGOS DE CRISTO, SIGNOS DE AMOR.

Desde ayer sábado día 25, la Iglesia de Granada cuenta con 34 nuevos beatos tras la celebración en Aguadulce (Almería), a cuya ceremonia de beatificación acudieron 6.000 personas, entre ellos muchos granadinos, familiares y fieles en general de nuestra Diócesis, especialmente vinculados a los lugares de los nuevos beatos. Son los nuevos beatos de los mártires de Almería, que el Papa ha recordado en su Ángelus de hoy, IV Domingo de Cuaresma.
Tras la celebración del sábado 25 de marzo, Solemnidad de la Encarnación del Señor, la Iglesia de Granada cuenta con 34 nuevos beatos, asesinados por odio a la fe en la persecución religiosa de los años 30 en España. Junto a ellos, otros 80 mártires de Cristo fueron beatificados, en la Causa Deán José Álvarez-Benavides y de la Torre y 114 mártires.
“Dichosos mártires de Almería, sembradores de paz, testigos de Cristo, signos de amor: abridnos caminos, enseñadnos a vivir la fe con pasión”. Esta es la letra del himno oficial que se proclamó en la ceremonia de beatificación y con la que se expresaba la alegría de la Iglesia por el testimonio legado a todo el pueblo de Dios de los mártires de Cristo y testigos de la fe que murieron por no renunciar a ella y perdonando a sus verdugos, afirmando así que Cristo vale más que la vida. El Himno a los Mártires de Almería fue compuesto por el almeriense Mons. Bernardo Ávila Ortega, capellán de honor de Su Santidad.
El Santo Padre ha aludido hoy en su oración del Ángelus, en la Plaza de San Pedro en Roma, a los nuevos beatos: "Ayer en Almería, España, han sido proclamados beatos José Álvarez-Benavides y de la Torre y 114 compañeros mártires. Estos sacerdotes, religiosos y laicos han sido testigos heroicos de Cristo y de su Evangelio de paz y reconciliación fraterna. Que su ejemplo e intercesión sostengan el compromiso de la Iglesia en la edificación de la civilización del amor».
NUEVOS BEATOS
El Palacio de Congresos y Exposiciones de Aguadulce, en Almería, donde se llevó a cabo la celebración, vibró con los miles de asistentes, que participaron en una ceremonia en la que el Obispo anfitrión, Mons. Adolfo González-Montes, recordaba el testimonio cristiano de los 115 nuevos beatos y quiénes eran: 95 sacerdotes y 20 laicos. De entre los laicos, hay 18 hombres jóvenes o padres de familia y dos mujeres, una de ellas gitana, segunda del mundo que ha sido beatificada. Concretamente, entre los laicos vinculados a nuestra Diócesis se encuentran siete jóvenes almerienses mártires en Turón, muertos por odio a la fe y destinados a trabajos forzados en la construcción de carretera, y dos laicos –padre e hijo- formados en Derecho en la Universidad de Granada; el hijo, además, natural de nuestra ciudad.



Asimismo, entre los nuevos beatos se cuentan 95 sacerdotes, de los cuales 20 eran de la Archidiócesis de Granada, nacidos aquí o formados en nuestros seminarios o que en el momento del martirio tenían como destino pastoral algunas zonas de la actual diócesis de Almería que en aquellas fechas formaba parte de la Diócesis de Granada. En la web diocesana www.archidiocesisgranada.es (apartado Noticias) está disponible el perfil biográfico de cada uno de los nuevos beatos granadinos.
A la celebración acudieron 6.000 personas, según informa la Diócesis de Almería, entre los cuales se encontraban numerosos fieles de Granada y de ellos también y especiamente familiares o fieles de los lugares vinculados a los nuevos beatos como Ogíjares o Válor.
Los mártires de Almería forman parte de los Mártires del siglo XX en España. No estuvieron implicados en política, no empuñaron armas ni eran de ningún bando. Fueron personas a las que se les arrebató la vida por odio a la fe. Su martirio comenzó en 1934 y se recrudeció en la guerra civil española, entre 1936 y 1939.
CELEBRACIÓN
Al margen de la consagración del vino y el pan, que es siempre la parte más importante de la Eucaristía, el momento central de la ceremonia comenzó con la súplica de la Beatificación y el descubrimiento del tapiz de los mártires.
El Obispo de Almería pidió al Papa Francisco, por medio de su representante, el Prefecto para la Causa de los Santos, Mons. Angelo Amato, la inscripción de estos Venerables Siervos de Dios entre los fieles beatificados por la Iglesia. Por su parte, por mandato del Papa Francisco, el cardenal Amato dio lectura, en latín, a la Carta Apostólica en la que Su Santidad inscribe en el libro de los beatos a los 115 Venerables Siervos de Dios, momento tras el cual se desplegó el tapiz de los mártires y se aclamaba con toda solemnidad y alegría el canto “Gloria in Excelsis”.
Cuatro sacerdotes portaron las andas con el Relicario, que contenía las Reliquias, precedidas por siete religiosas que portaban velas y, junto a ellas, siete familiares de los nuevos beatos que llevaban consigo la palma como símbolo del martirio. Estas Reliquias, una vez colocadas en el presbiterio, fueron incensadas por el Cardenal Amato.
Esta parte central de la ceremonia de beatificación concluyó con el agradecimiento público del Obispo de Almería al Papa, en nombre de las Iglesias particulares con nuevos beatos, por la Beatificación de los 115 mártires. A continuación, el Cardenal Amato entregó a Mons. González-Montes la Carta Apostólica, al mismo tiempo que se elevó el canto del “Gloria”.
CONCELEBRANTES
La ceremonia de beatificación fue presidida por el Cardenal Angelo Amato, Legado Pontificio, y fue concelebrada por nuestro Arzobispo Mons. Javier Martínez, arzobispo metropolitano, y el obispo anfitrión que acogía la ceremonia de los nuevos beatos, Mons. Adolfo González-Montes. Junto a ellos concelebraron el Nuncio Apostólico Mons. Renzo Fratini, cuatro cardenales españoles, entre ellos el Arzobispo de Valladolid y Presidente de la Conferencia Episcopal Española, Mons. Ricardo Blázquez. También concelebraron once obispos de diócesis españolas y dos obispos auxiliares, junto al clero diocesano de Almería y otras Diócesis.
Desde la Archidiócesis de Granada, además de familiares y fieles de los nuevos beatos, participaron en la ceremonia de beatificación una delegación, entre los que se encontraban el Delegado Episcopal para la Beatificación y Capellán Mayor de la Capilla Real de Granada, D. Manuel Reyes Ruiz, y el Vicario General y párroco de Deifontes, D. Francisco Javier Espigares Flores.
La Archidiócesis de Granada celebrará una Eucaristía de acción de gracias por los nuevos beatos que tendrá lugar en la Catedral el 7 de mayo, presidida por nuestro Arzobispo, y a la que está invitado todo el Pueblo de Dios. Asimismo, las parroquias de Granada con vinculación a alguno de los nuevos beatos tienen previsto también celebrar una Eucaristía de acción de gracias por su nuevo beato.

ALMERÍA ACOGE LA BEATIFICACIÓN DE OTROS 115 MÁRTIRES DE LA GUERRA CIVIL.

Amato: "Esta tierra se convirtió en terreno de conquista de los caballos del Apocalipsis".
"El cristianismo es la religión de la caridad de la vida y se opone a toda forma de prevaricación y violencia".
La Iglesia Católica ha celebrado hoy la ceremonia de beatificación de 115 mártires de la Guerra Civil, entre ellos Emilia Fernández 'La Canastera', la que desde esta mañana se ha convertido en la primera gitana beata del mundo, en el primer acto de este tipo que se realiza en Almería.
Más de 5.000 personas, entre miembros de la Iglesia Católica -entre ellos 21 obispos y 4 cardenales-, familiares de los mártires y fieles, entre ellos 350 gitanos invitados por el de Departamento para la Pastoral Gitana de la Comisión Episcopal de Migraciones, han presenciado este acto en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Aguadulce, en Roquetas de Mar (Almería).
La beatificación de estos 90 sacerdotes diocesanos, 22 laicos -entre ellos dos mujeres-, un religioso franciscano y dos sacerdotes operarios, asesinados por "odio a la fe" ha sido concelebrada junto al cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, por el obispo de Almería, Adolfo González Montes, así como por el arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez Fernández.
Durante su homilía en la beatificación de la causa denominada 'Deán José Álvarez-Benavides y 114 compañeros', Amato ha asegurado que la Iglesia Católica sigue recordando a sus mártires en la Guerra Civil española el "cristianismo es la religión de la caridad de la vida y se opone a toda forma de prevaricación y violencia" y ha sostenido que durante la Guerra Civil en España se vivieron unos años "trágicos",
Según él, se trató de un "periodo doloroso" en el que miles de personas murieron marcados "sólo porque eran católicos" en una tierra de "santos, teólogos, misioneros y fundadores de grandes órdenes".
"Esta tierra se convirtió en terreno de conquista de los caballos del Apocalipsis (...) parecía que el reino del Anticristo se había adueñado de vuestra tierra bendita", ha sostenido el cardenal, quien ha añadido que en estos años "todas las diócesis hicieron su contribución martiriana".
Ha afirmado que estos nuevos 115 mártires fueron fieles a sus promesas bautismales y "perseveraron firmes en la fe y han recibido la corona de la gloria" y ha destacado algunos de los lugares en los que fueron asesinados, como el Barranco del Chisme, el Pozo de la Lagarta o los cementerios de Berja (Almería) y la capital almeriense.


En su homilía ha recordado especialmente a cuatro de ellos, José Álvarez-Benavides, deán de la Catedral de Almería que murió fusilado por no renegar de su fe; Luis Belda y Soriano, laico miembro de la Asociación Católica de Propagandistas; Emilia Fernández 'La Canastera de Tíjola', la primera beata gitana que murió por no querer revelar el nombre de quién le enseñó a rezar el rosario, y Carmen Godoy, violada y golpeada antes de ser ahogada en el puerto.
"Los procesos sumarios, cuando se hicieron, se concluyeron fatalmente con condenas a muerte", ha dicho, para apostillar que durante la Guerra Civil hubo "miles de crucificados por todo el país, diseminados en aquella larga de Cuaresma de perdón".
Tras referirse casi de pasada a una nueva "persecución igual de miserable que busca desacreditar la herencia cristiana", Amato ha instado a los presentes a seguir el ejemplo de los mártires y "perseverar en la fe porque Jesús siempre estará con nosotros hasta el fin del mundo".
Durante la ceremonia, las reliquias de parte de ellos -los cadáveres de un gran número nunca fueron localizados- han sido trasladadas en procesión por cuatro sacerdotes, precedidos por siete religiosas y siete familiares de los mártires, hasta el altar mientras sonaba el himno de los Mártires de Almería, compuesto para esta celebración.
En el altar se ha descubierto además la gigantografía, el cuadro con los retratos de los nuevos beatos, antes de que el obispo de Almería recibiera del representante del Papa la denominada Carta Apostólica para la beatificación.

EL ALCALDE DE ALMERIA ASISTE A LA BEATIFICACIÓN DE LOS MÁRTIRES DEL SIGLO XX DE ALMERIA

LA IGLESIA BEATIFICA POR PRIMERA VEZ A UNA MUJER GITANA, EMILIA LA CANASTERA..

El Palacio de Congresos y Exposiciones de Aguadulce en Roquetas de Mar (Almería) se ha convertido en una iglesia para acoger la ceremonia solemne de beatificación de 115 mártires de Almería por sufrir la persecución religiosa durante la Guerra Civil española, entre ellos Emilia Fernández Rodríguez “Emilia la Canastera”, que ha sido la primera mujer de etnia gitana en todo el mundo a la que la Iglesia católica ha convertido en beata, tras fallecer a los 24 años en la cárcel en 1938 por no querer desvelar quién le enseñó a rezar el rosario.
Su beatificación ha llevado a cientos de personas de su etnia, entre ellos muchas familias enteras, a congregarse en un Palacio de Congresos casi abarrotado por más de 5.000 peregrinos, que han llegado en su mayor parte desde las localidades natales de los 115 mártires, de ellos 95 sacerdotes y 20 laicos.
La ceremonia, que se ha prolongado dos horas, ha estado presidida por el prefecto de la congregación para las causas de los Santos como legado pontificio del Papa Francisco, el cardenal Ángelo Amato, junto al obispo de Almería, Adolfo González Montes y el arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez, aunque también han estado presentes cardenales, arzobispos y obispos de toda España, además de una amplia representación de autoridades provinciales.
Una perfecta organización en la que se ha cuidado hasta el mínimo detalle, con numerosas pantallas dispuestas a lo largo de todo el salón de actos convertido en iglesia. El silencio y respeto guardado por los peregrinos han marcado un acto que apenas se ha visto interrumpido en una ocasión por los aplausos de los asistentes, cuando el obispo de Almería ha agradecido la presencia de los fieles de raza gitana.
Los peregrinos han disfrutado de una emotiva ceremonia en la que han tenido un destacado papel los cantos de la celebración, interpretados por la Orquesta y Coro Musicalma de Linares, junto con la escolanía de la Catedral de Jaén y conjuntos corales de Almería. Como resaltó en su despedida Adolfo González Montes, en la liturgia de la celebración no podía dejar de estar presente la imagen de la Virgen del Mar, patrona de Almería, junto a la del Santísimo Cristo del Amor.
La ceremonia ha comenzado con la súplica de la beatificación. El obispo de Almería ha pedido al Santo Padre Francisco, por medio de su representante, la inscripción de los 115 mártires entre los fieles beatificados de la Iglesia. González Montes ha argumentado que "estos mártires aceptaron el sacrificio de sus vidas y murieron perdonando a sus perseguidores, como deja ver el proceso de la Causa de los venerables siervos de Dios José Álvarez-Benavides y de la Torre, y 114 compañeros".
Esta causa tiene como contexto la persecución religiosa que comenzó en 1934 y se recrudeció durante la Guerra Civil. Su proceso ordinario comenzó en la diócesis de Almería un martes santo, el 11 de abril de 1995, y en él declararon más de 500 testigos. Se recogió abundante documentación que conformó los autos de la causa de más de 10.000 páginas, cerrada en Almería el 21 de mayo de 1998. El obispo almeriense ha querido precisar que los 115 beatificados "no son preferidos por ser de uno de los bandos enfrentados en la guerra, sino por haber muerto por amor a Cristo y por su causa".
Tras la súplica, el Cardenal Amato procedió a leer, en latín, por mandato del Papa Francisco, la Carta Apostólica en la que Su Santidad inscribe en el libro de los beatos a los mártires. A continuación, y antes de la celebración de una misa, se desplegó el tapiz de los mártires, el acto central de la ceremonia, se procedió a la aclamación y procesión de las reliquias, a su posterior veneración, al canto del Himno de los Mártires de Almería y al agradecimiento al Santo Padre.

La primera gitana mártir en todo el mundo
Emilia la Canastera pasará a la historia como la primera mujer gitana declarada mártir en todo el mundo. Emilia Fernández Rodríguez nació en 1914 en Tíjola (Almería) y se crió en sus humildes cuevas, donde no aprendió a leer ni a escribir, aunque sus padres le enseñaron el arte de hacer canastas, que vendía para poder subsistir. Tras casarse con un hombre de su etnia por el ceremonial gitano, su marido fue llamado a filas por el bando republicano, a lo que el matrimonio se negó, por lo que ambos fueron detenidos. 
Ella ingresó en la cárcel almeriense de Gachas Colorás, y fue condenada a seis años de prisión. En la cárcel, ya embarazada, pidió a sus catequistas que le enseñaran a rezar, y cuando le pidieron que delatara a quienes lo habían hecho, se negó a hacerlo, por lo que fue aislada y abandonada en una celda, donde, sobre un jergón de esparto, desatendida, parió una niña, que su catequista bautizó con el nombre de Ángela. La falta de cuidados tras el parto la llevaron finalmente a la muerte, sin denunciar a quien le había enseñado a rezar el rosario. Fue enterrada en una fosa común del cementerio de Almería, aunque sus restos no han podido ser identificados.
FUENTE: EL MUNDO.ES

EL PAPA RECUERDA LA BEATIFICACIÓN EN ALMERÍA DE "MÁRTIRES".

El papa Francisco recordó hoy la beatificación que se celebró en Almería de José Álvarez-Benavides y de la Torre y de los 114 compañeros considerados "mártires" de la Guerra Civil española, tras el rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro.

"Estos sacerdotes, religiosos y laicos fueron testimonios heroicos de Cristo y de su Evangelio de paz y de reconciliación fraterna", dijo Francisco sobre estos beatos, entre ellos Emilia Fernández "La Canastera", la primera gitana beata del mundo.
Francisco deseó que su ejemplo "y su intercesión apoye el empeño de la Iglesia en edificar la civilización del amor".
Más de 5.000 personas, entre miembros de la Iglesia católica, familiares de los mártires y fieles, y 350 gitanos invitados por el Departamento para la Pastoral Gitana de la Comisión Episcopal de Migraciones, acudieron a la beatificación de ayer en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Aguadulce, en Roquetas de Mar (Almería).

FUENTE: EL DIARIO.ES

HOMILIA DEL CARDENAL AMATO EN LA BEATIFICACION DE LOS DE ALMERIA

BEATIFICACIÓN MÁRTIRES DEL SIGLO XX DE ALMERIA.

sábado, 25 de marzo de 2017

TÚ PODER MULTIPLICA LA EFICACIA DEL HOMBRE.


Tu poder multiplica
la eficacia del hombre,
y crece cada día, entre sus manos,
la obra de tus manos.

Nos señalaste un trozo de la viña
y nos dijiste: «Venid y trabajad».
Nos mostraste una mesa vacía
y nos dijiste: «Llenadla de pan».

Nos presentaste un campo de batalla
y nos dijiste: «Construid la paz».
Nos sacaste al desierto con el alba
y nos dijiste: «Levantad la ciudad».

Pusiste una herramienta en nuestras manos
y nos dijiste: «Es tiempo de crear».
Escucha a mediodía el rumor del trabajo
con que el hombre se afana en tu heredad.

(Liturgia de las Horas)

HACER MEMORIA DE NUESTROS MÁRTIRES.

Los santos: amigos de Dios

Han pasado muchos años desde la primera vez que oí hablar del tío Ángel, para su hermana  Antonia, era corriente hablar de él, contar con él. Con lo que más disfrutaba era pensando cómo sería ese día, de eso estaba segura, en que tendríamos que viajar a Roma para su beatificación. De esto hace mucho tiempo.
Cuando supimos de la firma del decreto de martirio por el Santo Padre, nuestro primer pensamiento fue para ella. Aunque ella ya estaba con su hermano celebrándolo en el cielo.


Para nosotros, este momento que hoy vamos a vivir en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Aguadulce es algo más una solemne ceremonia de Beatificación,  es el agradecimiento de la Iglesia por sus vidas. Contemplarlos, será contemplar en ellos la gloria de Dios, por quién entregaron sus vidas, en quién siguen vivos y cómo faros luminosos, nos indican hacia donde tenemos que mirar y dirigir nuestros pasos en nuestra vida: ellos son caminos seguros para llegar a Dios.

Son muchos los Mártires del Siglo XX en España y como ocurrió en los primeros siglos de la Iglesia, son dignos de respeto y veneración, de hacernos amigos de ellos en nuestro peregrinar hacia la vida eterna, ellos que ya están gozando de la presencia de Dios. Hoy es una día especial para pedir  a través de nuestros nuevos beatos, la gracia de que Dios nos conceda el don de la perseverancia en la fe.

Paco H.

BEATIFICACIÓN MÁRTIRES DE ALMERÍA 25 DE MARZO DE 2017


BEATIFICACIÓN
Mártires de Almería
Deán José Alvarez Benavides y de la Torre
y 114 compañeros mártires de Cristo
25 de marzo de 2017
11:00 de la mañana
Palacio de Exposiciones y Congresos de Aguadulce
Almería


«La beatificación de los mártires,
estímulo para el testimonio y la evangelización»
 El pasado 7 de noviembre de 2016, en el contexto de la Jornada martirial, se leía en público el listado de los mártires de Almería que van a ser beatificados, una vez que así lo ha decretado el Santo Padre y tras años de estudio de la Causa y pormenorizado examen de la misma. En esa Jornada se comenzó a dar noticia de la identidad de los mártires de Almería incluidos en la Causa «José Álvarez Benavides y de la Torre y 114 compañeros muertos en odio a la fe», que serán beatificados en la Iglesia de Almería el 25 de marzo de 2017.

FUENTE DIÓCESIS DE ALMERIA.

Para ir a la relación de los Mártires en el blog pinchar AQUI

viernes, 24 de marzo de 2017

LAS IMÁGENES DE LA VIRGEN DEL MAR Y EL CRISTO DEL AMOR PRESIDIRÁN LA BEATIFICACIÓN.

El próximo sábado, 25 de marzo, Solemnidad de la Anunciación del Señor, la Iglesia beatificará a 115 mártires de Cristo, en la Causa del Deán José Álvarez-Benavides y de la Torre y 114 compañeros mártires de Cristo en la persecución religiosa que se inició en España en 1934 y se recrudeció en la guerra civil entre 1936 y 1939.
La ceremonia de Beatificación tendrá lugar en Aguadulce (Almería) a las 11 horas, la celebrará el Cardenal Mons. Angelo Amato, Prefecto de la Congregación de la Causa de los Santos, Legado Pontificio para la Beatificación, y nuestro Arzobispo de Granada y Arzobispo metropolitano de la Provincia Eclesiástica de Granada, Mons. Javier Martínez, será concelebrante principal, junto al obispo anfitrión, Mons. Adolfo González-Montes.
Asimismo, las imágenes que presidirán esta celebración serán las de la Virgen del Mar, Patrona de Almería, y la del Santísimo Cristo del Amor, una talla elaborada por al artista almeriense D. Jesús de Perceval.


VIRGEN DEL MAR – PATRONA DE ALMERÍA
Iconográficamente representa a una Virgen Madre que sostiene al Niño Jesús en su brazo derecho. Tiene igualmente n gran valor histórico para la ciudad de Almería, ya que desde el primer día en que la imagen fue encontrada el 21 de diciembre de 1502 por Andrés de Jaén en la playa de Torregarcía y recogida por el prior de Santo Domingo, quien la coloca en el camarín de la Iglesia, goza de un gran fervor popular.

SANTÍSIMO CRISTO DEL AMOR

La talla de la imagen del Cristo del Amor, fue elaborada por el insigne artista almeriense D. Jesús de Perceval. Es el titular de la Real e Ilustre Cofradía del Santísimo Cristo del Amor y Nuestra Señora del Primer Dolor, cuya sede canónica se encuentra en la Parroquia de San Sebastián de Almería.

TESTIGOS DE CRISTO. HIMNO MARTIRES DE ALMERIA.





Más información AQUI

jueves, 23 de marzo de 2017

ALUMNOS DE DIVERSOS CENTROS ESCOLARES DE ALMERÍA CONOCEN A LOS MÁRTIRES DE ALMERÍA A TRAVÉS DE “QUEDADA CON CRISTO”.

Alumnos de diversos centros escolares de Almería conocen a los mártires de Almería a través de “Quedada con Cristo”


Con motivo de la beatificación de nuestros mártires almerienses el Secretariado para la Pastoral de Infancia y Juventud ha visitado gran parte de los colegios religiosos de nuestra diócesis. En cada colegio los miembros de la pastoral juvenil presentaron el libro “Quedada con Cristo” para acercar a los jóvenes la figura y testimonio de nuestros mártires, les hablaron del sentido e importancia de la beatificación, y los invitaron a encomendarse a su intercesión a partir del próximo 25 de marzo. En la charla participaron los alumnos de ESO y Bachillerato de los centros: Amor de Dios, Saladares, La Salle Virgen del Mar, Divina Infantita del Ejido y Almería capital y Mater Asunta.

Estos encuentros continuarán esta semana en la Compañía de María, el colegio Diocesano san Ildefonso, y Altaduna. Una vez celebrada la beatificación la ruta por los colegios continuará, además de visitar diversas parroquias y sus grupos juveniles.

“HACÍA REALIDAD EL ‘COMO NOSOTROS PERDONAMOS’ DEL PADRENUESTRO”.

Un mártir, un beato, un santo... No son héroes. Son personas como todos nosotros que testimoniaron con su vida que Cristo lo es todo. La Iglesia nos invita a mirarles para aprender el modo como verdaderamente se cumple nuestro corazón, y a encomendarnos a ellos en nuestras oraciones. Son personas probablemente desconocidas para muchos, pero que han vivido entre nosotros en generaciones pasadas.
Es el caso de los mártires granadinos que serán beatificados el próximo día 25 en Aguadulce (Almería). Sobre uno de ellos, el Siervo de Dios D. Ángel Noguera Gallegos, sacerdote diocesano, hemos hablado con su sobrina Toñi Delgado, de Granada.
El Siervo de Dios D. Ángel Noguera Gallegos nació en Granada y fue bautizado en Santa Escolástica en 1908. Alumno del Seminario San Cecilio hasta alcanzar el doctorado, en 1933 fue ordenado sacerdote. Fue párroco de Fuente Vaqueros y de Alboloduy (Almería), donde era párroco cuando, a la edad de 27 años, fue martirizado el 31 de agosto de 1936 en el Pozo de la Lagarta del municipio almeriense de Tabernas. Hoy, sus restos están en la iglesia de los Santos Justo y Pastor.
A partir del 25 de marzo, el Siervo de Dios D. Ángel Noguera Gallegos será uno de los nuevos beatos granadinos de los 34 con los que contará nuestra Archidiócesis, en la Causa Deán José Álvarez-Benavides y de la Torre y 114 mártires de Cristo. Todos ellos sufrieron martirio en la persecución religiosa ocurrida en los años 30 en España, es decir, muriendo por no renunciar a la fe y perdonando a sus verdugos.

Toñi Delgado, junto al retrato de su tío expuesto en la Curia Metropolitana en la muestra "Sangre, sudor y lágrimas. Los mártires granadinos beatificados en Almería".
¿Qué sintió usted y en su familia cuando supo que su tío, D. Ángel Noguera Gallegos, iba a ser beatificado en Almería, junto a otros 114 mártires, entre ellos el deán de la Catedral de esa Diócesis?
¡Una gran alegría! En la primera persona que pensé fue en mi madre, que ya no está entre nosotros, ya que toda su vida giraba en torno a su hermano y su deseo era que la Iglesia llegara a reconocer su santidad. Por otra parte, sentía dentro con fuerza el dar gracias a Dios, dándome cuenta que mi tío ya no nos pertenecía, sino que pertenecía a la Iglesia.
¿Qué recuerda de su tío, de lo que le han contado o han transmitido en su familia?
Mi madre lo tenía siempre tan presente que hablaba siempre de él. Quizás lo que más me impresionaba era su fidelidad en las cosas pequeñas. Se remangaba la sotana y jugaba al futbol con los niños y jóvenes de su parroquia, visitaba a los pobres, a los enfermos, cantaba mucho... Y este vivir cada momento en Dios, por amor a Dios y al hermano, le hizo ser gran sacerdote. Y Dios le dio la gracia especial, igual que al resto de mártires, de responder al Amor de Dios dando su vida por Él.
En su familia, ¿cómo mantienen viva su memoria?
Quien ha mantenido viva su presencia y su cariño hacia él ha sido mi madre y compañeros de mi tío que iban a casa a visitar a mi madre. En mí ha habido un cambio grande en mi relación con mi tío. En un principio, al ver sufrir a mi madre, no quería tenerlo tan presente... Al morir ella, y sobre todo, cuando oí por televisión que el Santo Padre había firmado el Decreto de los mártires de Almería, todo me cambió dentro. Ahora es una relación constante con él: le pido, le doy mis preocupaciones, le pido que cuide de nuestra familia, que nos ayude a ser fieles a Dios en lo cotidiano...
Qué ha aprendido, usted y su familia, del testimonio de fe que les ha dejado su tío, que no renunció a la fe, aunque eso le supuso la muerte.
Por una parte, darnos cuenta que estamos en manos de Dios, saber que Él nos ama y pedir la gracia de responderle en cada momento del día siéndole fiel, saber que Él da la gracia para vivir cada situación por pequeña o grande que sea.
Otra cosa que me llama la atención es su vocación. Gran vocación al sacerdocio, que, aunque su padre quiso que dejara el seminario, él siguió adelante con su elección de Dios en su vida, en su vocación. Y quizás para mí lo más importante es su capacidad de perdonar. Me impresiona su prontitud y cómo hacía realidad el Padrenuestro: “como nosotros perdonamos...”.
Cuéntenos algunos rasgos de la persona de D. Ángel Noguera Gallegos. ¿Cómo se transparentaba en su vida la fe?
Mi tío Ángel [1] fue una persona enamorada de la Virgen. Mi madre contaba que cuando era pequeño a veces se iba de la casa y cuando volvía mi abuela le preguntaba: ¿dónde has estado? Y respondía: he estado acompañando a la Virgen porque está muy sola. Era una persona que siempre estaba contento, alegre, solidario, servicial, que continuamente daba su vida al necesitado, a cualquier persona, enseñaba a leer a los jóvenes que no sabían, le gustaba el futbol, cantaba muy bien y todos los dones que tenía los ponía al servicio de los demás.
En nuestra Diócesis, ¿qué sitios están vinculados a la vida de su tío?
Mis abuelos vivían en el Realejo, por lo tanto su parroquia era la de Santa Escolástica, en la iglesia de Santo Domingo, donde fue bautizado. Los seminarios donde estudió fue el de Virgen de Gracia y el seminario Mayor de San Cecilio. Cuando sacaron a todos los mártires que murieron en el Pozo de Tabernas, a mi tío lo trasladaron a Granada y lo enterraron en la parroquia de San Justo y Pastor porque mi abuela y madre vivían cerca y porque mi tío de niño fue acólito del párroco de esta parroquia.
¿En las parroquias o lugares vinculados a la vida eclesial de D. Ángel Noguera Gallegos en nuestra Diócesis hay prevista alguna actividad, oración, encuentro, vigilia, etc?
Nos unimos a los actos que con motivo de la beatificación se programaron en nuestra diócesis. Hablando con mis hermanos, sí nos gustaría después de la beatificación dar gracias a Dios por nuestro tío con una Eucaristía. Ya nos hemos puesto en contacto con los sacerdotes de Santa Escolástica, en concreto con el padre Joaquín, para ver cómo podemos hacer.
Imagino que asistirá usted y su familia a la beatificación de D. Ángel Noguera en Almería.
Sí. Asistiremos todos los que podamos de la familia para estar presente en este momento de gracia para la Iglesia y cómo no para toda la familia y familias de todos los próximos Beatos de Dios.
Paqui Pallarés


[1] Para ir a su biografía: Ángel Federico Noguera Gallegos
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Oración
Dios y Señor nuestro, que suscitaste en el Beato Ángel Noguera Gallegos, mártir, un testigo valeroso de la fe cristiana, y le diste la fuerza del Espíritu Santo para entregar su vida por Cristo y por el Evangelio.
No dejes de fortalecer también en nosotros la fe que, con la ayuda de la Madre de tu Hijo, él profesó; para que sepamos dar testimonio de Jesucristo y entregarnos a la evangelización de la sociedad de nuestro tiempo, sin sucumbir a la duda y al desánimo ante las dificultades.
Ayúdanos, por intercesión de tu mártir a amar incluso a nuestros enemigos, y a ser constructores de concordia y de paz, para que gocemos siempre de libertad religiosa, sean respetados los derechos de las personas y tu nombre sea bendecido y alabado ahora y por siempre. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Pídase la gracia que se desee alcanzar por intercesión del Beato Ángel Noguera Gallegos: Padrenuestro, Ave María y Gloria.
Comuniquen los favores y gracias concedidas por su intercesión a la Delegación Episcopal para las Causas de los Santos, Plaza Bendicho, nº 9. 04001 Almería.

Con las debidas licencias eclesiásticas.


LA CANTANTE MARÍA JOSÉ SANTIAGO, ESTRELLA INVITADA DE LA VELADA DE ACOGIDA A LOS PEREGRINOS DE LA BEATIFICACIÓN.

El próximo 24 de marzo, a las 21:00h, el Auditorio de Roquetas de Mar acogerá una velada de bienvenida a los peregrinos llegados de distintos lugares de España, así como a todos los participantes de la Beatificación. La gala estará amenizada por la famosa artista, María José Santiago, que recientemente pudo cantarle al Papa Francisco en un encuentro del Pontífice con 5000 gitanos de todo el mundo.


La velada contará, además, con la participación de la Orquesta y Coro de Roquetas de Mar que interpretará, como estreno mundial, el Himno compuesto para los Mártires de Almería. El coro la “guardia de Dios” y la banda de música de la localidad completarán esta velada musical.

Además de todas estas actuaciones, se escucharán testimonios de la Iglesia necesitada, así como de algunos de nuestros mártires almerienses. El momento más esperado será la bendición del cuadro de la gitana Emilia que ha realizado Raúl Berzosa para su veneración en la catedral.

miércoles, 22 de marzo de 2017

LA SAGRADA IMAGEN DE LA VIRGEN DEL MAR ESTARÁ PRESENTE EN LA BEATIFICACIÓN DE LOS MÁRTIRES DE ALMERÍA.

La patrona de Almería, la Santísima Virgen del Mar, estará presente, el próximo día 25 de Marzo, en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Aguadulce, en la Beatificación de los 115 Mártires de Almería, que encabeza el Deán José Álvarez-Benavides y De la Torre.



Así lo hacía saber la Muy Antigua, Pontificia, Real e Ilustre Hermandad, a través de un comunicado oficial, donde expresa su gozo de poder comunicar la grandiosa noticia de la presencia de la Patrona en tan magno acontecimiento para toda la Diócesis de Almería.

martes, 21 de marzo de 2017

LAS NUEVAS 115 BEATIFICACIONES ELEVARÁN A 1.725 EL MARTIRIOLOGIO DE LA GUERRA CIVIL.

FUENTE "LA GACETA"
PARA IR AL ORIGINAL PINCHAR AQUÍ
El obispado de Almería ha anunciado que el próximo 25 de marzo tendrá lugar el acto de beatificación de 115 mártires asesinados durante la persecución religiosa que se padeció en la retaguardia republicana durante la Guerra Civil. Es una nueva tanda que elevará a 1.725 el número total de beatos martirizados en la persecución religiosa en España durante la Segunda República y la Guerra Civil. En este caso son 95 religiosos y 20 seglares, entre ellos dos mujeres. Una de ellas de raza gitana que fue torturada y asesinada por negarse a contar quién le había enseñado a rezar el rosario.
Todo apunta a que no serán los últimos beatos de una de las mayores persecuciones religiosas de la Historia. Existen abiertos, de momento, otros 172 expedientes para el proceso de beatificación de víctimas del martiriologio español de los años treinta. Además, el Obispo Complutense, Juan Antonio Reig Pla, aprovechó el ochenta aniversario del inicio de las sacas de Paracuellos del Jarama para anunciar que se iniciaban los trámites de la causa de canonización de 44 mártires asesinados en esa localidad madrileña.
El holocausto católico en España
Los historiadores de la Iglesia Católica lo tienen claro, pese a la tradición del martiriologio de los tres primeros siglos de cristianismo por parte de los emperadores romanos, es en el siglo XX cuando más mártires han sido asesinados por negarse a renegar de sus creencias. Autores como Alfonso Ropero o John Fletcher aseguran que durante el pasado siglo ha habido más mártires cristianos que en los diecinueve anteriores. Tres son los momentos que han contribuido a que esto sea así: el nacimiento, crecimiento y expansión del comunismo; la Guerra Cristera en México; y la Guerra Civil en España.
Los años treinta en nuestro país han dejado 1.625 beatificaciones, además de que se encuentran abiertos casi dos centenares de procesos más, entre ellos los iniciados en noviembre pasado por el Obispo Complutense, Juan Antonio Reig Pla, en relación a 44 de los miles de asesinatos que se cometieron en la localidad madrileña de Paracuellos del Jarama.
Es curioso que, pese a las continuas acusaciones de la izquierda de connivencia del régimen del general Franco con la Iglesia, hubo que esperar hasta varios años después de su muerte para empezar a ver reconocidas las virtudes de los mártires de la Guerra Civil con la beatificación. El 29 de marzo de 1987, el Papa Juan Pablo II beatificaba a tres carmelitas descalzas conocidas como las “mártires de Guadalajara”. Por lo tanto se tardó más de cincuenta años en empezar a reconocer estas virtudes, y ello a pesar de que la persecución a la que fueron semetidos miembros, fieles y bienes de la Iglesia durente la Segunda República y la Guerra Civil estaban perfectamente documentadas por los informes diocesanos realizados en la posguerra. La recopilación de estos informes ha permitido conocer la magnitud de la persecución, en la que fueron asesinados 6.832 religiosos, además de casi 10.000 seglares pertenecientes a movimientos de dentro de la Iglesia como la Adoración Nocturna o la Acción Católica.
A partir de esa primera beatificación de mártires de la Guerra Civil, el Papa Juan Pablo II tomó la decisión de realizar actos colectivos. Así, en 1992 beatificó a 122 religiosos asesinados en España en 1936 en la Plaza de San Pedro del Vaticano ante la asistencia de más de 20.000 personas. Y dio un paso más, aprovechando sus visitas apostólicas, como hizo en Madrid en mayo de 2003.
Su sucesor, el Papa Benedicto XVI, también se mostró partidario de este reconocimiento múltiple y el 28 de octubre de 2007, ante cientos de miles de personas, beatificó a otros 489 mártires de la represión religiosa que la izquierda realizó en España durante la Guerra Civil. No fue la última beatificación numerosa, el 12 de octubre de 2013, ante más de 25.000 personas, se celebraba la beatificación más numerosa de la historia con 522 víctimas del martirio al que los frentepopulistas asesinaron, en muchos casos, entre terribles tormentos.
Posterioremente se han producido dos nuevas beatificaciones, en este caso lo ha hecho el Papa Francisco. En octubre de 2016 furon elevados 4 benedictinos y en diciembre pasado 108 nuevos beatos, todos ellos asesinados durante la represión en la retaguardia republicana durante la guerra en España.

El número total de mártires por la persecución religiosa entre julio de 1936 y abril de 1939 fue de 11.743 víctimas. Fueron asesinados 6.832 religiosos, además de 3.911 seglares y al menos 1.000 seminaristas.

lunes, 20 de marzo de 2017

CELEBRADA EN GRANADA EN LA ABADÍA DEL SACROMONTE, LA EUCARISTÍA PREPARATORIA A LA BEATIFICACIÓN DE LOS MÁRTIRES DEL ALMERÍA DEL SIGLO XX.

 El pasado sábado, 18 de marzo, se celebró en la Abadía del Sacromonte la Eucaristía por el rito mozárabe, en memoria de los mártires vinculados al Sacromonte que serán beatificados el próximo sábado, 25 de marzo en Almería.
Mons. Javier Martínez, Arzobispo de Granada, celebró la Eucaristía por el rito hispano-mozárabe y concelebraron D. Manuel Reyes, delegado episcopal de la beatificación en nuestra Archidiócesis, D. Alberto Espinar, Abad, D. David Cuerva y D. Juan Sánchez-Ocaña, miembros del Cabildo de la Abadía del Sacromonte y los rectores del Seminario Mayor “San Cecilio” y del Seminario Misionero “Redemptoris Mater”: D. Enrique Rico y D. Mariano Catarecha.


Asimismo, participaron en la Misa los seminaristas de ambos Seminarios y los hermanitas del Cordero del Monasterio “Luz de la Paz”, que cantaron en la celebración. Igualmente, algunos familiares y personas cercanas a los nuevos beatos se unieron a la celebración.
En el altar, la Imagen del Cristo del Consuelo presidía la celebración, ya que coincidió con la celebración de los cultos cuaresmales de la Cofradía del Cristo del Consuelo y María Santísima del Sacromonte, que se celebraron al término de la Eucaristía. Asimismo, los retratos de D. Diego Ventaja y D. Manuel Medina Olmos se colocaron a ambos lados del Crucificado.
El próximo 25 de marzo, Solemnidad de la Encarnación del Señor, 34 mártires de Cristo vinculados a nuestra Diócesis de Granada serán beatificados en Aguadulce (Almería) en la Causa “Deán José Álvarez-Benavides y de la Torre y 114 compañeros mártires de Cristo”, y de esos 34 siervos de Dios, hay varios vinculados al Sacromonte.
MÁRTIRES VINCULADOS AL SACROMONTE
Algunos de los siervos de Dios que tuvieron relación con el Sacromonte son: Segundo Arce Manjón, quien fue capellán del Sacromonte desde 1907; José María Martínez Vizcaíno, Eduardo Valverde Rodríguez y Manuel López Álvarez, estudiantes en el seminario del Sacromonte.
Muchos de ellos fueron discípulos o colaboradores de D. Diego Ventaja o D. Manuel Medina Olmos, beatos muy vinculados a la Abadía del Sacromonte de Granada y asesinados al comienzo de la Guerra Civil Española, víctimas de la persecución religiosa.
Nuestro Arzobispo aclaró que la tumba de Segundo Arce Manjón fue descubierta hace poco en la Abadía del Sacromonte: “Uno de ellos era no exactamente miembro del Cabildo del Sacromonte, pero sí capellán del Sacromonte, y estaba enterrado aquí, y solo hace mes y medio o un par de meses es cuando se ha descubierto donde estaba su tumba, debajo de la tumba del fundador, estaba allí enterrado”.
EL LENGUAJE DEL TESTIMONIO
Mons. Martínez habló del testimonio a todos los presentes: “El lenguaje cristiano por excelencia, el único lenguaje que no admite sustitución es el lenguaje del testimonio, es el lenguaje del martirio. Es el lenguaje que pone de manifiesto que Cristo es lo más querido en el corazón, que Cristo es lo más querido en la vida, eso es lo que celebramos en cada Eucaristía, eso es lo que sostiene nuestra vida cristiana, eso es lo único que puede sostener nuestra vida consagrada y nuestra vida sacerdotal.
Yo diría que el testimonio no es una cosa que se pueda aprender, en libros o en... porque el testimonio solo surge cuando primero es un testimonio del propio corazón. Es decir, es el propio corazón quien da testimonio de Cristo a nosotros mismos, cada uno”.